Sol.

Hoy fui yo, conmigo. Traté de no quedarme dormido, lo que cubría mi espalda, hasta mi ombligo. Me di vuelta. Todo parece como un cuento. Una tonta historia de dos personas. En esta parte, se encuentra una, narrando como pasan los días, mirando al vacío, escribiendo de madrugada, contemplando la noche, sintiendo un dolor extremo dentro de sí. Vuelve a su cama, respira, crece y madura por dentro. Miro de reojo la hora. Debería estar durmiendo. En medio de mí, todos esos complejos, la tendencia a estar en lo cierto. Precipitadamente, como si lo complejo estuviera predestinado a quedarse sobre el escritorio, voy de lado a lado, tratando de dormir. Susurro la letra, mientras veo las ventanas tintinear. Ya no sé a que me refiero con eso. Es que todo a perdido significado o sentido, y no es una simple metáfora para explicar mi modo de sentir, es que en realidad ya ni sé como estafarme, como engañarme, solo sé que tengo mucho para dar, puedo estar dentro, sentarme, hablar, reír y bromear al respecto. Me queda un día. Después adiós. Todo termina con s.

Cadàver

Susurros de madrugada
las luces, centellas,
las sábanas desordenadas.

Mis gritos se ahogan
la incidencia, pureza
el miedo a llorar.

Son tres, sin saber
las cosas que quieren
que dejan
jugar y reír.

No señalan
los puntos azules
aquel cielo turqueza
la altura gruesa.

Sin paracaídas
jamás volveré
sus salidas
sus silencios.

Hoy ya no queda más
que escuchar
tal vez mi voz
alcance lo fìsico

Los ojos y el cuerpo
que me engañan
yo dormido
como un muerto.

Perder.

Cada vez que creo que estoy cerca,
me das de comer mierda.
Lo exótico de tu sentir,
yo lo ignoro y me volteo.
Me lo estoy tragando,
me duele.
No dormiré hoy,
tus dedos y mis manos.
Lloraré, en mis sueños.
Mi alma no saciará su sed de lágrimas.
Te quiero, me muero.
Y no lo aceptaré, no lo aceptaré,
aunque deba de hacerme el tonto
recocijarme y alcanzerte.

Tarjeta.

Te estuve buscando, desviando la mirada por los cafés, los bancos y las plazas.
No había nadie como tú, solo imitadores que se llaman a sí mismos artistas.
Sabes como ser diferente, aún cuando lo estándar se halla vuelto inusual.
Andas por un delgado límite entre locura y razón.
Te compones y te descompones.
Cada vez que camino, intuyo tu presencia, la deduzco.
Sé que andas divagando, vagabundeando alrededor.
Pululan tus encantos, acariciando mis mejillas.
Entro a tiendas, reviso escaparates.
Con la esperanza de que por los pasillos te encuentre.
Me sonrías forzadamente,quizás sola o acompañada.
Yo te ignore y pueda conservar la dignidad.
A pesar de que ese instante sea uno hermoso.
Verte y desearte lo peor.

Desarma.

Si el mundo acabará,
digo,es un decir.
Me faltará tu voz,
tu aroma, tu sabor.
Mi cuerpo llorará tu ausencia
moribundo de inanición.
La suerte se dará un tumbo
caerá sobre su sombra silenciosa.
La belleza gritará,
mis versos encadenados.
Si el mundo acabará,
digo, es un decir.
Se notará que existo
y al existir termino.
Porque son tus sueños
los que me encierran.
Los cabos sueltos de tu indecencia
mi tortura elocuente y taciturna.
Soltarás tu idea
callaremos juntos.
No llegará el día
a mis noches cíclicas.
Me faltará el aire
con su inasistencia obligada.
Si el mundo acabará,
digo, es un decir.
Porque ya no estarás
y no estás.
Para mí el mundo acabo
ya no quiero estar sin estar.
Muero tácitamente,
en este duelo apocalíptico.

El apareo de los minotauros

En la conciencia promiscua,
tallados en roca funébre
impregnados de adjetivos
de sucesos copulativos
en desenfreno.
Auras malolientes
de lo más roto
viscerante
complejo y atiborrado
especies sin parir.
Son premoniciones
largas verdades
la danza
completa precisión
un disparo
dos
ridículo.
Al muchacho
entregas
rotulós
te vas
en soles
te vas
y lloran
sin ser vistos
en monosílabos.
Un atisbo de risa
de alegría
de fiesta
tras emprender la marcha
al grotesco muladar
donde la madre
espera y calla.

Sus ojos.

Me gusta como se pieden sus ojos, y su mirada me ilumina con su luz redentora. Los pasos que di para seguirla de lejos dieron resultado. Me voy acercando y su sonrisa tonta me llena de alegría.
Le estuve pensando, me desperté pensando que lo había logrado, pensé que podía abrazarle sin preocupaciones, pensé que había ganado la carrera. Sin embargo le veo y advierto cierto aire ajeno en su sentir.
De pronto tuve miedo.Comenzó la resignación y el caos.No quería ver más. Su sonrisa ya no era tonta, era avida de deseo. Perecí.

Paralelepípedo.

Cáscaras de fruta que van desordenando
espacios públicos y trampas para osos
solemnes tributos a los paganos
cuestiones morales ingratas
patricidios y paradojas.
La moraleja de todo esto es no parar
ser más insensato
aferrarme y sucumbir.
Me privaré de consecuencias
y los botones me harán falta.
El viento habla, corre y ladra
las historias en rojo
el verde del encanto
los parámetros abstractos.

Gárgola.

Me desquicié.
Estaba al borde.
Mirandolos sufrir.
Quise ser parte de su dolor.
Asfixiarlos en su miseria.
El día se me hizo corto.
El asco invadió mi mirada.
Sabía que tenían la culpa.
La indecisión.
La inseguridad.
La ignorancia.
La perversión.
Regurgité y me hice a un lado.
Escapé.
Dejando sus rostros asombrados
Sus cuerpos destrozados
Sus corazones desahuciados.

Sueño

Estabamos hipnotizados, siendo llamados por una fuerza que no podíamos vencer. Caminando sin saber la dirección, moviendo los pies sin saber que nuestros rumbos se cruzarían. Llegamos al mismo punto por lo cerca que estabamos. A punto de sumergirnos en un mundo nuevo te aparte, te besé, te escondí y te hice el amor. Ellos venían por nosotros, pensé que mientras más durara,más protegida estarías. Luego de vestirnos la puerta sucumbió. Hice lo posible, lo juró, pero nos atraparon contra nuestra voluntad. Sabía que era lo correcto pero no lo quería aceptar. Cuando desperté no te conocía ni reconocía mi entorno. Me incorporé e hice lo que se me ordenó que hiciese, y segui los caminos asignados,nuevamente,cabizbajo.Pasaron días, semanas, hasta que te vi en el lugar más improbable. Te reconocí y mis labios no esperaron mucho. Quería despertar a tu lado cada día imaginario.Sin embargo las preguntas surgieron, y por amor quería estar equivocado, por amor quería ignorarlo,por amor quería seguir soñando. Pero la maldita verdad siempre nos llega, y mi maldita conciencia me dijo que despertará. Busque la forma de traerte conmigo y lo conseguí. Huímos, tratamos de hacer algo, trataste de hacer algo. Yo quería estar contigo, y hacer lo que tú quisieras que haga. Salvamos muchas vidas y yo no pelee por ellos,pelee por ti. Me hacía más fuerte con tu amor, ya no soñaba a la fuerza, sino a voluntad. Avanzavamos por rutas peligrosas hasta que nos acorralaron. Te hicieron soñar y yo quería protegerte, pero sabía que la única forma sería que también me hicieran soñar. Desperté y no te conocía.Sin embargo, te amé.Te amé y te encontré. Y te pudé despertar.Pude despertarlos a todos mi amor. Yo quise estar contigo, y descubrí que la única forma de estar siempre contigo sería habitar en tus sueños. Tú no duermas, no importa,estoy bien aquí, me conformo con tus noches y tu espíritu, tu aroma simulado,tus besos simulados,mas tu amor, sé que es real,sé que es mío.

Espacio.

Si me lo van a pedir, que me lo pidan bien. No creo que sea necesario recurrir a un tema si es que no se va a prolongar la exaltación del yo. Los moños y collares valen. Los lentes ya pasaron de moda. Por otro lado, son dos O continuas, un minutero y un secundero. Los usos y desusos de las palabras van restando trucos y sobretodo acalorando distinciones raciales. Gorros volteados, ratones y plásticos indescifrados. Centrado. Vienen más. Es díficil poner tilde si es que no tomaste un curso básico de redacción. Las paredes van cayendo, no hay nada que exponer. Un gusto a huida, a cansancio. Falta una mitad, solo una, la temperatura está nivelada y las miradas van de persona en persona. Buscan calificarnos o modelarnos.Todavía no se abre, no se quiere abrir. Un agujero y un sporbete. Sus sonrisas los delatan, hacia la izquierda, la derecha y las teclas están más suaves que nunca. El orden me precipita, no puedo detener los brillos. A pesar que quiera que en unos instantes tanta pantomima se acabe. No corre,no corre.

Te de testan.

O vas y regresas a la mitad.Porque pareces moribundo.Pareces uno de esos menesterosos. Saca tus manos de los bolsillos, trata de que se te vea más hombre y menos hermafrodita. Sueltate esa coleta,apaga tu cigarrillo,volteate y sacúdete. No cojees y escupe antes de hablar. Come a tus horas y si no comes no comas porque comer en demasía es gula. Cuando tengas sed bebe de las fuentes, las fuentes son fuente inagotable de satisfacción y de cosas que te ayudaran a ser una persona decente. No dobles las rodillas. Conserva la calma, mira al frente firmemente, desenvuelvete, hazte el muerto.Hazles creer que vales algo aunque valgas la mitad de lo que prometiste que valdrías. Imprimé mis documentos, tomame una foto, dame un beso en la mejilla, apaga las luces y echate a dormir.

Joder.

Hoy no cogimos.
Pudé sentir un vacío en mi cama.
Algo que sobraba en mi cuerpo.
El semen llegó hasta el cerebro.

Hoy no cogimos.
Mis labios están secos
Mis manos extrañan su sexo
Mi voz no le ha mentido aún.

Hoy no cogimos.
Y me siento menos vivo
Las horas pasan
La comida no me sabe a nada

Hoy no cogimos
Muero por hacerla mía
Destrozar sus energías
Morder sus hombros
Morder su espalda
Morder su cuello
Morder sus piernas
Morder sus brazos
Su aliento,su ardor.

Esta bien.

A pesar de lamentarlo muero por hacerlo de nuevo. Irme evaporando en medio de esas botellas,ir desapareciendo,primero mente,luego cuerpo. Que mi alma se desentienda de todo esto.
Mi voz se apagará,no me alcanzarán las palabras para pedirte perdón. Mas sé que nunca lo sabrás.Su olor se extinguió en un par de días, las bocas no soltaron confesiones y mi conciencia solo culpaba, no aceptaba.
Esa acumulación de miradas, esos gemidos tan potentes y temidos. Sus brazos y sus uñas, sus piernas y la visita a su vientre,a sus entrañas. Su cuerpo. Hace tanto. Lo cambio todo. Las heridas en mi espalda jamás cicatrizaron. No pude editar ese pedazo de linealidad. Hoy quiero más.
No tienes la más mínima idea, el frío olor a uvas y a esperma lo envuelve todo. Se va deslizando mi confesión tras tu puerta,no quise fingir pero lo hice tan bien. Sonreí y hasta pregunté. Dudé.
Me queda el sinsabor de no saber si uso esto para aceptar mi error o ahogar mi crudo,amargo,ineludible dolor.

Cruces.

Las luces cruzaban las mentes
batían la locura de lado a lado
mentían a su tiempo,
loaban a su tiempo.
Bajaban despacio,
desde el cielo
a contraluz
fingiendo ser fuego.
Lucían tan claras,
preferían salir a oscuras
la vergüenza se notaba
por el rubor de sus intensidades
y el rumor de sus intimidades.
Carecían de escrúpulos,
iban de arriba hacia abajo
soltando chispas
cayendo y causando estragos
sobre ojos incautos
y placeres inmundos.
Troyanos y fariseos
van narrando solisticios
y caen arrodillados
perplejos y alucinados
uno tras otro derrotados
por lo imprevisto
por lo mundano.
Por no haber dicho que sí
por no haber aceptado lo cierto,
por no haber visto el firmamento.

Solista

En verdad. A la mitad. Me caigo. Se ahoga, grita, estira las manos y solo el pulgar logra salir de las baldosas. Se resbala. Grita.Nadie puede. Se va cayendo y no flota. Se acerca, pide sin pedir. No puedo sostenerme. Se me duerme el pulgar. Intento morder el suyo. Paralelismo. En el mismo lugar pero lejos. Cerca. Mientras las escaleras van despertando,los escalones y su indiferencia. No me mira. Nos miramos. Las lunas están bloqueadas. Previamente fui bajando, sus ojos iban cojeando,y se arrastraba su deseo. Trababa la puerta, no sabía nada. Pensaba que había dañado todo. Maldecía. Sentía culpabilidad. Me merecía todo eso y más. Yo fui el primero sin poder rescatarle. Sus músculos se desgarraron hace un tanto, yo quise sujetarle y cobrarle todas sus inquisiciones. Le miré. Sostuve la respiración y me precipité por debajo de sus letanías. Esquivó mis hombros de acero. Recogió sus cosas. Se marchó. Le hice mil preguntas a mitad de camino mientras despertaba caminando. Respiraba su propio aroma,reía y me caía. Me caí.

Gotas.

Evaporado,procesado por no valer la pena.Aplicar mis deseos a las letras.Las escaleras desde donde me precipito.Esta escampando.Mis labios andan secos,jamás volveré a tomar agua de lluvia.Me siento envenenado,la presión psicodélica de mis direcciones. A la deriva.Seguir el conteo. La cuenta de reversa. Quiero entrar,dejame entrar,quiero entrar, no dejas de cerrar.No te cierres. Quiero entrar y sentirte,que todos hablen de nosotros,que mi vida sea un libro abierto y tus emociones derramen sangre en cada página. Volveré a abrir la boca en medio de la lluvia. Soy preso, cautivo,adicto a tus limosnas,a suplicarte,a adorarte. De qué escribir,de qué entender. Nadie más direcciona o programa.Empapado.Serio y desolado.

Valerse.

Caigo,en el presentimiento de las olas.Rondas.
Colegios al rededor.Posibilidades.
Mientras allá solo quedan tres.
En el resto.En el rostro.
Mi presencia samaritana.
Caer,por vencido.No lloraré.
Me elevé.La mitad de veces no me importa.
No me duele más.
Ruges.Ruegas.Tiemblas.
Ayer no pude concebir.Despacio.
Coges mis lados.Uno por turno.
Estás.Te alcanzo.
Subo y bajo.No narro.Me voy defrente.
Ya a nadie le cuesta tanto contar.