domingo, 22 de agosto de 2010

A ti, abuelo.

No he llorado tu partida. Y lo siento. Te quiero. Te quiero. He ocultado mi pena entre furia, pasión y locura, mas no me he olvidado de ti. Mi ausencia solo evoca el pasado. Tan ausente, sin prestarte atención, tan ausente a pesar de que estuve ahí. Te quiero. De verdad que te quiero, y verte me afecto, porque si no estuve durante, estuve al final. Te quiero y no puedo hacerte regresar. Pero si pudiera dejaría que vivas mi vida por ti. Te quiero. Te quiero. Es cierto, me pude despedir, pero jamás te leí un poema, jamás te lei siquiera un verso, a pesar de que la poesía la heredé de ti. Seamos uno, habita en mí. Te quiero. Te quiero. Adiós. Nos vemos. Porque sé que estaré contigo, sé que me esperaras. Te quiero. Adiós.

No hay comentarios:

Publicar un comentario